miércoles, 28 de junio de 2017

El cultivo del tomate

El tomate pertenece a la familia de las solanáceas, como el pimiento, la berenjena y la patata.
Es el cultivo estrella en el huerto de verano, el tomate es conocido y consumido en todo el mundo.
Es una planta que requiere temperaturas cálidas (entre 17 y 32º) ,  mucho sol en las hojas y agua en las raíces.
La siembra podemos iniciarla a finales de invierno o al comienzo de la primavera, en invernadero o lugar protegido y cuando las plantitas miden entre 12 y 15 cm, que tendrán al menos 4 hojas verdaderas, ya podemos trasplantarlas a su ubicación final en el terreno que hayamos preparado en el huerto, siempre y cuando la climatología lo permita (si la temperatura está por debajo de los 10º  no es aconsejable).


                        plantas en invernadero, listas para ser trasplantadas al huerto

El marco de plantación mínimo que requieren las tomateras es de 60x35 cm , es decir 60 cm de separación entre las hileras y 35 cm entre plantas. Si disponemos de espacio suficiente en el huerto y aumentamos éstas medidas será beneficioso para las plantas, así cada una tendrá suficiente espacio de suelo,   no tendrán que competir por los nutrientes y podrán desarrollar bien su sistema radicular. Esto en lo que se refiere a la parte subterránea de la planta,   pero la parte aérea:  tallos, hojas y flores,  también se verá beneficiada al estar las plantas mas separadas entre si, aumenta la aireación y la luminosidad, el sol llega a todas las partes de la planta y prevenimos la aparición de plagas y enfermedades.
No es lo mismo repartir el suelo y los nutrientes entre 3,  que entre 6 plantas y tampoco es lo mismo cultivar 3 tomateras en 1,5 mts que cultivar 6,  estas últimas estarían pegadas unas a otras, con el follaje comprimido,  sin aire y luz suficiente para desarrollarse bien. Además de ser un nido de plagas y enfermedades.
Que un marco de plantación sea amplio, es aplicable a todos los cultivos, respetando el espacio que necesitan las plantas para su desarrollo, la cosecha es mas abundante que si las cultivamos demasiado juntas.


                                        las tomateras a la semana de ser trasplantadas

Para que nuestras tomateras se desarrollen sanas y vigorosas necesitan que les proporcionemos un suelo fértil, bien mullido y con buen drenaje. Su sistema radicular es poco profundo, por lo que si regamos abundantemente y el suelo no drena bien provocaremos encharcamiento y con ello riesgo de problemas : asfixia de las raíces, pudrición y enfermedades provocadas por hongos.

La tomatera necesita humedad constante en el suelo (humedad no encharcamiento), para conseguirlo, el riego tiene que ser frecuente y regular. La cantidad de agua necesaria nos la marca la tierra, entre riego y riego la tierra no debe secarse.
Si por descuido o por riego irregular aportamos agua en abundancia, la planta intenta absorberla y el tomate comienza a llenarse y expandirse en exceso,  esto provoca que su piel no resista la presión y acabe rompiéndose, apareciendo las típicas grietas.


Para potenciar el desarrollo del sistema radicular y la floración podemos aportar un fertilizante rico en fósforo y para conseguir mayor calidad y producción de tomates aportamos potasio. En el mercado disponemos de fertilizantes ricos en estos nutrientes.

El objetivo de la poda es dejar de 1 a 2 tallos principales, se reduce el número de tallos y el follaje que tendría la tomatera. Para ello, eliminar los chupones que salen de la axila que se forma entre el tallo y las hojas, de manera que los nutrientes (en mayor cantidad) se centren en los frutos. La poda de saneamiento consiste en cortar los tallos laterales que descompensan la formación de la planta y las hojas viejas o deterioradas.

Si las temperaturas son muy elevadas (superiores a 37º ) y el sol incide directamente sobre los frutos, hay riesgo de que se puedan ver afectados. El tomate es sensible a la radiación solar y si el indice ultravioleta de los rayos solares es elevado (golpe de sol) puede provocar deformaciones y coloración irregular del fruto, lo que se conoce como asolanado.
 








tomates asolanados y matas con plaga de araña roja.

 
El entutorado conviene hacerlo por varios motivos :
Las tomateras están sujetas, se desarrollan erguidas y protegidas si en la zona hay vientos,
mejoramos la aireación y ninguna parte de la planta toca el suelo, con lo que evitamos posibles enfermedades por hongos o pudrición.
Los tallos que mantienen a los tomates se apoyan en el tutorado, para que no se doblen por el engorde y aumento de peso.


     inicio del entutorado con cañas

Finalmente nos quedaría acolchar el bancal de cultivo (es muy recomendable).

                                                                   acolchado con paja

                                 a mediados de julio comenzamos a recolectar tomates


                                               las matas en agosto en plena producción

Las plagas que aparecen con mas frecuencia en las tomateras son las siguientes :
Araña roja, fácil de distinguir, en el haz de las hojas (parte superior) se aprecian puntitos amarillos y viven en el envés (parte posterior de la hoja), es un insecto chupador que se alimenta del tejido celular de las plantas. Si no se eliminan a tiempo tejen telaraña y terminan secando las hojas y demás partes de la tomatera.
Tratamiento preventivo con azufre pulverizando bien toda la mata.Tratamiento ecológico lo realizamos mediante jabón potásico, lavando bien la planta y pasadas 2-3 horas administramos aceite de Neem.
Tratamiento químico con insecticida-acaricida, principio activo  Abamectina.
Pulgón y mosca blanca, insectos que tambien son chupadores, como la araña y que pueden transmitir virus provenientes de otras plantas infectadas. Conviene tratar cuanto antes para evitar riesgos de contagio.
Tratamiento ecológico similar al de la araña, jabón potáscio y aceite de Neem.
Tratamiento químico con insecticida sistemático -  Imidacloprid.
Tuta Absoluta, también conocida como polilla perforadora o gusano minador del tomate.
Cuando en su ciclo vital es oruga, se alimenta de todas las partes de la tomatera, tallos, hojas y tomates (perforando). Tratamiento preventivo-curativo aplicando Bacillus thuringensis (ecológico) en pulverización foliar.

Las enfermedades con riesgo de padecer, son las siguientes :
Oidio, polvo blanquecino sobre las hojas y tallos, preventivamente evitar encharcamientos, con alta humedad y temperaturas elevadas es fácil que pueda desarrollarse este hongo.
Tratamiento ecológico preventivo y curativo pulverizando bien toda la mata con azufre micronizado soluble o con cola de caballo.
Tratamiento químico con fungicida especifico (de contacto, penetrante o sistémico).
Mildiu, aparecen manchas amarillas en el haz y blanquecinas en el envés de las hojas, tratamiento ecológico preventivo-curativo, pulverizando bien toda la mata con oxicloruro de cobre  
De persistir el hongo hay que eliminar las partes dañadas y una vez saneada la tomatera la tratamos con un fungicida especifico (de contacto, penetrante o sistémico).
Antracnosis, hongo que se manifiesta con manchas irregulares en hojas, tallos y frutos, de color anaranjado, y que van oscureciendo hasta llegar a ponerse negras.
Aplicamos el mismo tratamiento que para el mildiu.












3 comentarios:

  1. Buenas noches Silverio,
    Antes que nada, darte las gracias por tus vídeos, los cuales sigo y estoy suscrito, y que me son de muchísima ayuda y me sirven de inspiración para las labores y gestión del huerto que tengo desde Septiembre.
    Dado lo anterior esta es la primera vez que cultivo tomates y me gustaría preguntarte si es posible saber si utilizas el jabón potásico y el aceite de Neem y, si es así, si los utilizas de forma conjunta o por separado, como también las proporciones que utilizas.
    Muchas gracias y por favor no dejes de colgar tus vídeos, cuyos consejos nos son de mucha ayuda.
    Saludos Josep

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  2. Buenas noches, ante todo te pido disculpas por la tardanza en contestarte. Para que no me vuelva a suceder te pido por favor que los comentarios me los dejes en alguno de mis vídeos en el canal de youTube, ya que lo reviso casi a diario y así las respuestas a los comentarios son casi de un día para otro. Bueno, en cuanto a utilizar conjuntamente el aceite de Neem y el jabón potásico es lo ideal, ya que el jabón hace de emulsionante y además de facilitar la solubilidad del aceite de Neem, favorece la eliminación de los insectos dañinos. Un saludo y hasta pronto, Josep!!

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  3. Se me había olvidado dejarte las dosis de aplicación. Añade de 3 a 5 ml de jabón por cada litro de agua, lo mezclas bien y a continuación añades también de 3 a 5 ml de aceite de Neem por cada litro de agua, se vuelve a mezclar y ya está listo para ser pulverizado. Saludos Josep

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